El masaje tradicional tailandés (Thai) es un trabajo corporal profundo que ayuda a restablecer nuestra energía vital y a reequilibrar nuestros aspectos físicos, mentales y emocionales.
Las técnicas utilizadas son presiones y estiramientos. Las presiones se realizan con los dedos, las manos, los pies, los codos o las rodillas y siguen las líneas energéticas del cuerpo.
Los estiramientos pasivos nos permiten recuperar flexibilidad y alcanzar una relajación muy profunda.
Este masaje es parte de la medicina tradicional tailandesa cuyo origen se encuentra en
Origen e historia
Se relacionan los principios de la medicina tradicional tailandesa con la llegada a Tailandia de los monjes budistas de
II-III A.c. Su fundador, conocido como Shivago Komarpaj, era un médico del entorno directo de Buda. Los conocimientos de esa medicina se transmitieron oralmente, igual que los textos religiosos, y se han encontrado muy pocos escritos sobre la medicina tradicional y los masajes. Tradicionalmente, se recibía (y todavía se recibe) el masaje tradicional tailandés en los templos budistas y se consideraba una práctica sagrada.
¿En que nos puede ayudar?
Este masaje, considerado preventivo y terapéutico, beneficia a todos los que quieren conservar un buen estado de salud y un alto nivel de bienestar. Acompañado por una respiración consciente, el cuerpo se estimula por dentro y por fuera. Cuando se recibe con regularidad, se aprecia claramente una mejoría de los sistemas nervioso, respiratorio, circulatorio, digestivo e inmunológico; disminuye el estrés, relaja zonas de tensión en todo el cuerpo, eleva el nivel de energía, aumenta la autoestima, ayuda a la digestión, combate el insomnio, incrementa la flexibilidad, libera bloqueos físicos y energéticos, armoniza la relación psicosomática.